La Tiger 1200 Rally Pro, pilotada por nada menos que Cameron Donald, dos veces campeón en el TT de la Isla de Man y todo un entusiasta de las aventuras off-road en moto, logró imponerse contra todo pronóstico ante la marea de ligeras motos de enduro en la prueba disputada durante el fin de semana del 9 al 10 de julio.

«Físicamente ha sido una de las experiencias más duras que he vivido jamás sobre una moto», dijo Donald. «Correr en ese terreno y con estas motos durante 24 horas, divididas en cuatro vueltas de seis horas cada una, fue una auténtica batalla. Fue brutal».

«Mucha gente nos dijo que estábamos locos; no creían que fuéramos capaces de completar ni una sola de las cuatro vueltas de la carrera... y ya no digamos acabarla. Y lo que es peor, un participante veterano, que ha logrado acabar la carrera 24 veces, dijo que el trazado de este año era, de lejos, el más complicado técnicamente».

«No dejó de sorprenderme lo bien que iba la nueva Tiger 1200 superando las dificultades del terreno. Nada se le ponía por delante».

«Había trampas por todas partes... salientes de más de un metro de altura y también socavones de más de medio metro de profundidad rellenos de bulldust o polvo fino, que a menudo ocultaban rocas o raíces; pero el ímpetu de la Tiger 1200 y su rueda delantera de off-road de 21 pulgadas me permitían apuntar y disparar.

»En un terreno tan difícil y técnico hay que ir con mucho cuidado; pero una vez nos pusimos manos a la obra, la Tiger 1200 fue imparable. Los enlaces eran cálidos y cómodos para nosotros gracias a los puños calefactables, el control de velocidad y la suspensión semiactiva.

»En una carrera tan extenuante como la 24-Hour Trial exprimimos al máximo las Tigers, pero son motos muy capaces y brillaron por todo lo alto. Cuando veía a otros corredores engrasando y tensando sus cadenas no podía dejar de sonreír. Y es que la transmisión por cardán de la Tiger no requiere mantenimiento».

«Fue una pena que no pudieran acabar la carrera las dos motos, pero es una muestra más de la dureza de esta prueba», comentó Donald.

El compañero de Cam Donald para esta carrera, también a los mandos de una Tiger 1200 Rally Pro, fue su «hermano de otra madre» Donald Owen, un experto piloto de enduro, con experiencia también en motocross y carreras sobre asflato; además de mecánico de motos profesional. 

Tras aguantar de forma heroica 16 horas en su primera participación en la 24-Hour Trial, Owen se topó con un profundo agujero de bordes afilados que le impidió continuar, así que este loco barbudo se volcó inmediatamente en la tarea de ayudar a Cam a cruzar la línea de meta.

«DNF» son tres letras que nadie quiere oír en una carrera, y yo me empezaba a sentir desconsolado. Pero la ayuda de otros pilotos que se pararon para echarme una mano y de los voluntarios en los puntos de control fue impresionante», comentó Owen. «Mientras yo estaba atrapado en medio de la oscuridad, un tío caminó casi tres kilómetros entre los matorrales con una linterna frontal para ir a ayudarme. Nunca lo olvidaré.

»Nuestro siguiente objetivo era seguir ayudando a Cam. Su capacidad para pilotar al ritmo justo (ni demasiado rápido, ni demasiado lento) y mantener el estado mental adecuado para superar todas las adversidades fue increíble».

Cam Donald explicó que su técnica para afrontar una prueba de enduro con una maxi-trail es el ímpetu. «Mientras vayas avanzando, vas bien. 

»El modo Off-Road de la Tiger 1200 Rally Pro le permitía desplegar la potencia de forma relajada, lineal y fácil de controlar, que es exactamente lo que necesitas cuando estás en terrenos tan difíciles y técnicos que pondrían en dificultades a una moto de 250.

»Forjé un vínculo especial con esa moto. Luchamos, discutimos, reímos y lloramos, pero la llevé de vuelta a casa sana y salva, igual que ella a mí. Juntos logramos cruzar la línea de meta. ¡No puedo creer que lo hiciéramos! Me siento como si hubiera ganado una carrera».

La preparación de la moto para esta exigente carrera fue mínima. Las Tiger 1200 Rally Pro se equiparon con las defensas de altas de motor de Triumph, unos robustos neumáticos de tacos aptos para el uso en carretera para maximizar la tracción y una barra de luces LED de 8 pulgadas para una mayor visibilidad nocturna (de acuerdo con la normativa de la carrera). El caballete central y las estriberas traseras se retiraron para aumentar la distancia al suelo. 

La nueva Tiger 1200, notablemente más ligera y mucho más potente, tiene una manejabilidad y unas especificaciones técnicas líderes en su categoría, además de todas las ventajas del nuevo motor tricilíndrico T-Plane de Triumph. En conjunto, se ha diseñado para ser la maxi-trail más capaz, ágil y manejable del mundo.